La escoba representa el elemento aire y la unión de las dos polaridades masculino (palo) y femenino (paja en redondo u ovalado) y en las épocas de presecución de brujas, era el lugar perfecto para ocultar la varita. Quedaba disfrazada como un elemento más de uso cotidiano con la varita dentro. El interior del mango tenía compartimentos ocultos, donde se escondían combinaciones de hierbas, aceites, plumas y otras cosas que eran parte de hechizos y rituales. También se usan como varas de poder, para enfocar y dirigir la energía mágica y para barrer zonas y limpiarlas de negatividad. Y sobre todo como elemento de protección de los hogares.
Las brujas solían dejar su escoba en la puerta cuando salían de casa como una señal para los visitantes haciéndoles saber que en ese momento no estaban.
Antiguamente la escoba era la encargada de recoger las cenizas de los fuegos sagrados, de los fuegos rituales, ya que estas cenizas contienen la energía alquímica del ritual y la escoba mágica no alteran la magia de los mismos. Con esta ceniza, se solían hacer sacos o se espolvoreaban en los cultivos, para una buena cosecha, para que estuvieran protegidos de plagas, sequías y demás cosas negativas. Las mujeres cogían las escobas y montadas sobre ellas las iban esparciendo estas cenizas (de ahí se sacó la imagen de las brujas volando montadas en la escoba) mientras cantaban a la tierra, danzaban y reían. Una acción de culto a la madre tierra que se deformó hasta darle un cariz demoníaco. Antiguamente, también se saltaba una escoba en las bodas para que la pareja tuviese buena suerte y ésto lo seguimos haciendo en las uniones de manos paganas…
Cuando ponemos una escoba con las cerdas hacia arriba es para alejar a los malos espíritus o las energías negativas, para proteger la casa y todos los que habitan en ella. También para no tener visitas indeseadas, sean astrales o físicas
Si la colgamos sobre la puerta con las cerdas mirando en la dirección a la apertura de la puerta, impedimos la entrada a personas no deseadas.
Dos escobas cruzadas sirven para impedir que cualquier negatividad entre en el hogar a través de la chimenea o la puerta de entrada.
Nunca hay que llevar una escoba vieja a una casa nueva, trae mala suerte.
Nunca se barre caminado hacia atrás… o hacia adelante o de lado.
Se barre de adentro hacia afuera.
La escoba mágica literalmente limpia las energías etéricas y es un objeto sagrado, por lo que no se debe usar para barrer el suelo. Se utiliza al empezar el ritual para limpiar las energías de la zona donde vamos a realizar el ritual, barriendo de forma simbólica para alejar las energías impuras o cargadas de negatividad
También podemos utilizada en rituales de alejamiento o destierro y para «llevar» a un espíritu o energía molesta a otro lugar, lejos muy lejos, utilizándola a modo de varita.
Las brujas solían dejar su escoba en la puerta cuando salían de casa como una señal para los visitantes haciéndoles saber que en ese momento no estaban.
Antiguamente la escoba era la encargada de recoger las cenizas de los fuegos sagrados, de los fuegos rituales, ya que estas cenizas contienen la energía alquímica del ritual y la escoba mágica no alteran la magia de los mismos. Con esta ceniza, se solían hacer sacos o se espolvoreaban en los cultivos, para una buena cosecha, para que estuvieran protegidos de plagas, sequías y demás cosas negativas. Las mujeres cogían las escobas y montadas sobre ellas las iban esparciendo estas cenizas (de ahí se sacó la imagen de las brujas volando montadas en la escoba) mientras cantaban a la tierra, danzaban y reían. Una acción de culto a la madre tierra que se deformó hasta darle un cariz demoníaco. Antiguamente, también se saltaba una escoba en las bodas para que la pareja tuviese buena suerte y ésto lo seguimos haciendo en las uniones de manos paganas…
Cuando ponemos una escoba con las cerdas hacia arriba es para alejar a los malos espíritus o las energías negativas, para proteger la casa y todos los que habitan en ella. También para no tener visitas indeseadas, sean astrales o físicas
Si la colgamos sobre la puerta con las cerdas mirando en la dirección a la apertura de la puerta, impedimos la entrada a personas no deseadas.
Dos escobas cruzadas sirven para impedir que cualquier negatividad entre en el hogar a través de la chimenea o la puerta de entrada.
Nunca hay que llevar una escoba vieja a una casa nueva, trae mala suerte.
Nunca se barre caminado hacia atrás… o hacia adelante o de lado.
Se barre de adentro hacia afuera.
La escoba mágica literalmente limpia las energías etéricas y es un objeto sagrado, por lo que no se debe usar para barrer el suelo. Se utiliza al empezar el ritual para limpiar las energías de la zona donde vamos a realizar el ritual, barriendo de forma simbólica para alejar las energías impuras o cargadas de negatividad
También podemos utilizada en rituales de alejamiento o destierro y para «llevar» a un espíritu o energía molesta a otro lugar, lejos muy lejos, utilizándola a modo de varita.
© Morgana Barcelona.